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"Convenio 189 de la OIT: después del 8 de marzo llega el 30 de marzo"

  • La lucha por los derechos de las trabajadoras del hogar representa la lucha contra la injusticia social y la desigualdad más salvaje

Artículo de Vicente Sánchez, secretario general de CCOO de Construcción y Servicios, publicado en Nueva Tribuna, en relación con el 30 de marzo, Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, el colectivo más feminizado y precario de todos los que componen nuestro tejido socio-económico.

30/03/2018.
"Convenio 189 de la OIT: después del 8 de marzo llega el 30 de marzo"

"Convenio 189 de la OIT: después del 8 de marzo llega el 30 de marzo"

El pasado 8 de Marzo fue un día histórico, en el que las mujeres y los hombres de este país demostraron que la lucha por la igualdad es una cuestión que atañe a todas las personas. Sin embargo, el revulsivo que supuso esa jornada no se puede quedar en una celebración anual. Para que toda esa energía se materialice en mejoras reales para las mujeres debemos seguir luchando y reivindicando todos los días del año. Por este motivo, aprovechando que se acerca el 30 de marzo, Día Internacional de las Trabajadoras del Hogar, queremos recordar que el Gobierno aún no ha ratificado el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo, sobre el trabajo decente para las trabajadoras y los trabajadores domésticos.

Se trata de un acuerdo de mínimos, en cuyo preámbulo se resalta que el trabajo doméstico sigue siendo infravalorado e invisible, realizado principalmente por mujeres, muchas de las cuales son migrantes o forman parte de comunidades desfavorecidas, debido a lo cual son más vulnerables a la discriminación con respecto a las condiciones de trabajo, así como a abusos de sus derechos humanos.

CCOO de Construcción y Servicios llevamos desde 2014 reclamando la ratificación del mismo por parte del Gobierno con una campaña nacional con el lema ?Trabajadoras de Hecho y Con Derechos?. Un año más tarde, ante el evidente inmovilismo, llevamos a cabo la recogida de 10.000 firmas de trabajadoras del hogar que presentamos al Ministerio de Empleo y Seguridad Social, así como informamos de ello a los diferentes partidos del arco parlamentario nacional y europeo.

En marzo de 2016, PSOE y Unidos Podemos registraron sendas iniciativas en el Congreso de los Diputados. Pocos meses después, la Eurocámara por abrumadora mayoría aprobó un informe para reconocer el trabajo doméstico como una profesión más, con idénticos derechos y deberes a cualquier otro sector de actividad.

Unos meses más tardes iniciamos una campaña a nivel autonómico, consiguiendo que los parlamentos de Castilla y León y el País Valenciano se manifestaran a favor de la ratificación del Convenio 189 de la OIT. Junto a ello, publicamos la única guía existente para la prevención de riesgos laborales domésticos, pues desgraciadamente estas trabajadoras están excluidas del ámbito de aplicación de la Ley de Prevención de Riesgos, lo cual supone una discriminación muy grave.

Desde octubre de 2017 el sector de las trabajadoras del hogar es uno de los que forman parte de la campaña sindical ?Precarity War? en la que visibilizamos al conjunto de la sociedad la precariedad que viven estas trabajadoras en su día a día. Las medidas que desde CCOO proponemos incluyen: derecho a la representación y la negociación colectiva, derecho a la prestación por desempleo, jubilación parcial o anticipada, ayuda a mayores de 55 años, aplicación de la normativa de riesgos laborales y reconocimiento de enfermedades profesionales, reducir los periodos de carencia en la cotización para la prestación económica en los casos de incapacidad temporal y maternidad, dar potestad a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.

Para CCOO, la lucha por los derechos de las trabajadoras del hogar representa la lucha contra la injusticia social y la desigualdad más salvaje; porque históricamente las labores domésticas y de cuidados han sido realizadas casi exclusivamente por mujeres y es desolador comprobar que precisamente este trabajo, tan fundamental pero tan invisible, es el que menos ha avanzado en derechos. Por ello es necesario en primer lugar que el Gobierno ratifique el Convenio 189 de la OIT, para inmediatamente abrir una mesa con los agentes sociales y económicos, que permita que empecemos a construir el Sector del Empleo Doméstico, como lo hemos hecho con el resto de sectores productivos.

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