CCOO del Hábitat | 20 abril 2024.

SMI y personas trabajadoras Empleadas de Hogar

    La subida del Salario Mínimo Interprofesional, tendrá un gran impacto en sectores precarios como el de Trabajadoras del Hogar

    29/03/2022.
    SMI y personas trabajadoras Empleadas de Hogar

    SMI y personas trabajadoras Empleadas de Hogar

    La subida del salario mínimo interprofesional, que desde el año 2016 se ha incrementado un 52%, situándose en 2022 en 1.000 euros mensuales en catorce pagas, tendrá un gran impacto en sectores precarios, afectando así de manera muy relevante a las personas trabajadoras del hogar.

    A fecha enero de 2022, en el sistema especial del servicio del hogar familiar, en Castilla y León había un total de 16.204 personas dadas de alta, de las cuales más de un 30% son de nacionalidad extranjera. Asimismo las mujeres ocupan el 96% de los trabajos del sector, siendo por tanto un colectivo totalmente feminizado y considerado uno de los más vulnerables, con mayor inseguridad jurídica a pesar de los cambios normativos que se han ido produciendo.

    Y es que este colectivo se rige todavía por una normativa específica que en materia de retribuciones remite al pacto entre personas empleadoras y personas empleadas, y en todo caso, nunca deben ser inferiores al SMI. Por tanto, se trata de un perfil de los que más debilidades presentan dentro del ámbito laboral y, en general, en la sociedad.

    La concienciación acerca de la necesidad de proteger a este colectivo de trabajadoras, siendo CCOO del Hábitat una de las organizaciones impulsoras, supuso que la Organización Internacional del Trabajo, OIT, estableciera por primera vez un marco regulador, adoptando en su 100º reunión (junio 2011) el convenio nº 189 sobre el trabajo decente para las trabajadoras y trabajadores domésticos.

    A pesar de las múltiples campañas llevadas a cabo por la organización demandando la ratificación de este convenio por parte de nuestro país, once años después aún sigue sin materializarse.

    Todos estos datos nos permiten concluir que el servicio del hogar familiar será de los más beneficiados por la subida del salario mínimo interprofesional.

    Otra consecuencia directa en positivo es que se elevan considerablemente las cotizaciones a la seguridad social puesto que éstas se realizan en función de los tramos de retribuciones percibidas, si bien nos emplaza a una mayor vigilancia para velar porque no se potencie la economía sumergida, constatada claramente en el sector.

    Este avance tan significativo, no debe pararnos a la hora de seguir reivindicando mejoras para este colectivo, en aras a una equiparación total en derechos el resto de personas trabajadoras por cuenta ajena.

    Un hito reciente que hay que destacar ha sido la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que ha resuelto que la normativa española que excluye a las personas trabajadoras del empleo doméstico del acceso a las prestaciones por desempleo es contraria al derecho de la Unión al constituir una discriminación, pues las sitúa en desventaja respecto al resto de personas trabajadoras. EL TJUE ha sentenciado lo que desde CCOO del Hábitat se viene denunciando desde hace ya demasiado tiempo, y es el hecho de que las trabajadoras del Hogar sean el único colectivo que no cotiza y por tanto no tiene acceso a la protección social básica del paro, lo que perpetua su condición como trabajadoras más precarizadas de nuestro mercado de trabajo. El Tribunal europeo aduce en su fallo una posible discriminación por razón de género debido a que más del 95% son mujeres.

    CCOO viene reivindicado la inclusión de las trabajadoras empleadas de hogar en el sistema de protección por desempleo de forma reiterada. Así se incluyó en el Acuerdo de Diálogo Social para la integración de este régimen especial en el Régimen General de la Seguridad Social suscrito por CCOO y UGT con el Gobierno en el año 2011, un compromiso incumplido hasta la fecha.

    El próximo día 30 de marzo es el Día Europeo del sector del empleo doméstico; debe ser un momento de valorar los avances habidos, sobre todo desde el año 2.012 en que se llevó a cabo una reforma completa de este régimen, que pasó a integrarse en el régimen general, si bien con peculiaridades diferenciadoras todavía; y las posteriores subidas del SMI en los últimos cuatro años, que están posicionando a este sector poco a poco en el lugar que le corresponde en igualdad y dignidad.

    Pero también debe ser un día de reivindicación para la continuidad de la mejora en las condiciones de trabajo, algunas de ellas básicas, tales como:

    • Ningún salario por debajo del SMI

    • Erradicar el fraude a la Seguridad Social respecto a su alta, evitando así la economía sumergida.

    • Dotar de competencias a la inspección de trabajo no sólo en lo que respecta al fraude en las retribuciones y cotizaciones, sino también otras condiciones, como las de seguridad y salud

    • Por una equiparación total en la cotización

    • Por una revisión de las formas de extinción del contrato y sus consecuencias

    • Por una mayor visibilización y un control de los riesgos para la salud y psicosociales del colectivo

    • Por un acceso YA a la prestación por desempleo

    • Por el derecho a la negociación colectiva

    Ha sido finalmente la sentencia del Tribunal Europeo la que probablemente fuerce el cambio de la normativa que termine con la perpetua discriminación de este colectivo

    Treinta años después de que se celebró el congreso que proclamó el día 30 de marzo como el del Trabajo de los servicios del hogar, hay que seguir haciendo visible este trabajo que tan alto valor aporta a la sociedad, para que los gobiernos y la propia sociedad trabajen día a día para mejorar los derechos de este colectivo

    Desde CCOO del Hábitat de Castilla y León nos unimos a la conmemoración de la mejor manera posible, continuando el 1 de abril en la lucha por una equiparación total de derechos básicos en el empleo doméstico con los del resto de personas trabajadoras por cuenta ajena.